Me gusta estar sola para estar contigo.
Logras que escuche la luz, mire al sonido.
Me gusta verte para hablar
aunque afuera los árboles lo sepan todo.
Fui a ti y me has echo prisionera
cautiva y anclada a tus cadenas
Despierto cada mañana
a la luz de tu mirada
Ciñe mi collar igual que un beso
y haré de tu mirada mi mundo
con la fuerza de tus silencios
Entonces bendeciré tus pies con mi boca,
para ser gata que maulla tu nombre sin demora...

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